¿Cómo mantener tu toldo en el mejor estado durante todo el año?
Esta es la pregunta que siempre nos hacemos.
Lo preferible es realiza una limpieza a fondo cada medio año, mejor en la época estival.
Con los siguientes consejos que te vamos a dar tu toldo brillará como el primer día:
- La limpieza. Esto es fundamental, quita el polvo que se acumula con una aspiradora y usa una manguera (o agua y jabón) para la suciedad más resistente. Necesitamos que las posibles humedades y las suciedades sean eliminadas lo antes posible para evitar que se adhieran a la lona.
- Sigue las recomendaciones. Cuando compramos un toldo viene con unas instrucciones donde encontraremos ciertas recomendaciones del fabricante. Lo mejor es seguirlas al pie de la letra para prolongar la vida de nuestro toldo.
- Trucos. Para que no se pierda mucha intensidad del color de la tela se puede aplicar un truco casero como es agua mezclado con vinagre. También existen soluciones especiales para aplicar en las manchas más persistentes de nuestros toldos, siempre con un cepillo suave y aclarándolas con abundantes cantidades de agua. Para los brazos de nuestro toldo, lo mejor es usar un paño suave de micro fibra.
- Siempre recoger el toldo en seco. Somos conscientes de que no va a ser posible hacerlo todas las veces, pero es la manera más efectiva si queremos prevenir la aparición de moho. Recoger el toldo lo antes posible antes de que empiece a llover y mantenerlo enrollado cuando el tiempo sea desfavorable son dos aspectos muy importantes a tener en cuenta para su óptima conservación.
- Prestar atención. Revisa que cuando has recogido el toldo ninguno de los elementos que lo forman estén dañados, así evitaremos que los brazos se desnivelen o que se deforme la lona. Lo más aconsejable es que un profesional lo revise de forma anual, preferiblemente antes o después de la estación de verano.
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